Querido equipo,
Pasan los días y el tiempo vuela. Espero que se
encuentren muy bien. Hoy quería compartirles un sentimiento muy importante que
creo es el que conecta con las fuerzas mas importantes y poderosas de la vida:
el agradecimiento.
Todos los días doy gracias por la oportunidad de
trabajar en esta entidad hermosa que es el SENA. Recorrer el país, encontrarse
con la gente y saber que se realiza el trabajo bien y que se transforman las
vidas de otras personas es en extremo satisfactorio. Me siento agradecida por
trabajar al lado de seres humanos que están llenos de determinación para hacer
las cosas bien hechas. Es que hacer el bien, implica anteponer siempre la
ética y los valores, saber autogestionar los límites y aprender a decir no.
Pero también decir si.
La autoregulación es poderosa porque todos sabemos
en nuestros corazones lo que es adecuado y lo que no tiene correspondencia
porque puede dañar al otro, al vecino, al amigo, al compañero de trabajo.
En nuestras manos hay una responsabilidad muy
importante y no consiste en nada menos que en ser impecables, es decir que
actuamos de manera correcta porque de nuestro trabajo adecuado y correcto,
depende que a muchos colombianos les vaya bien. De nuestras decisiones depende
que seamos eficientes en la inversión que los impuestos de muchas personas se
gasten con inteligencia en el presupuesto de la entidad.
Quiero decirles que no hay espacio para
equivocarnos, porque siempre hay consecuencias. La primera con nosotros mismos,
la segunda con nuestras familias, nuestros padres, parejas e hijitos. Y la
tercera con la sociedad.
Hagan las cosas bien. Trabajen con amor y
agradecimiento. Saben qué pienso muchas veces? Que hoy puede ser mi último día
en el SENA, y entonces salgo a la calle con más fuerzas y ganas. Es como cuando
a uno le hacen la reflexión de qué pasaría si hoy fuera el último día de
nuestras vidas?
No me aferro a nada. No me apego a esta entidad, con
todo el amor que le tengo, porque no me pertenece ni a mí ni a nadie. Hay un
error gravísimo en los seres humanos cuando nos creemos dueños de las personas,
de las cosas, de los lugares. Uno no es dueño de nada, ni de nadie. Cuando eso
se distorsiona, se generan demasiados desequilibrios en la vida de uno y de los
demás. El SENA es un activo de los colombianos, de esta patria por la que tanto
trabajamos.
Han sido semanas intensas. Debemos terminar el año
bien, con el presupuesto ejecutado de manera impecable y honesta. Hay que
fenecer la cuenta y cumplir con las metas de la entidad. Mejorar el ambiente de
trabajo, relacionarnos mejor, respetar al otro.
Recibo los mails que me envían y uno a uno los leo
con atención. Y tomo decisiones.
Gracias por mantenerme informada, siempre, siempre
estoy atenta y concentrada en el trabajo que tengo en este tiempo por hacer.
Por eso por la noches cuando termina el día, duermo tranquila. Espero que todos
ustedes también!!!
Un gran saludo, María Andrea Nieto Romero
Directora General
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